La luz tiene todo el espectro de colores y según se refleje en los objetos vemos unos o otras. Al tocar nuestra piel, la luz del sol nos calienta. Cuando un objeto como el globo recibe la luz, la absorbe en parte, se calienta, se estira, pudiendo llegar a explotar. Podemos encontrar energía en el sol, el aire, al agua...
La ciencia nos ayuda a ver lo invisible porque se pregunta el por qué de las cosas. Lo conseguimos investigando, con tecnología... En este caso, gracias a una cámara con detectores infrarojos y a unas cuentas sensibles a la luz ultravioleta.